Toda la vida te sentiste orgullosa de ser una mina de buena conversación. Y con esto no me refiero precisamente a tu habilidad para hablar sin respirar, sino a la amplitud de temas que manejas, la cantidad de libros que chupas como esponja, etc. Pero últimamente te das cuenta que la gente a tu alrededor ya no busca ese saber que a vos tantote gusta compartir, sino que ahora te convertiste en una especie de animal en extinción y todos te preguntan como si te analizaran: ¿estas yendo al baño bien? ¿no comiste nada que te pueda dar mas gases no? ¿haces los ejercicios para manejar bien el perineo?. Como llegaste a esta situación, como permitiste que un día se conviertan en públicas tus necesidades fisiológicas.. que hiciste para que esto pasara?. Por mas que lo analices no vas a encontrar la respuesta, no la hay. No hace falta que te tires un pedo en una cena familiar para que todos empiecen a hablarte de que ahora ya no podes contener nada. El simple hecho de tener una panza que crece – y no solo por la pastas – hace que todo el mundo opine como si fueran expertos. Las mujeres de la familia -y del trabajo, del subte, de la calle.. en fin las mujeres en general- opinarán porque sienten que tienen el derecho porque ya estuvieron allí o porque algún día vana estarlo (aunque tengan 90alños siguen creyendo esto) y los hombres opinan porque alguna vez tuvieron que ¨aguantarse¨ a una mina embarazada (sea esta esposa, tía, vecina o conocida).
Y asi pasa cuando un día te das cuenta que tu marido un día te aparece con toda una explicación acerca de que verduras deberías no comer para evitar los gases.. y vos, tentada de risa porque no podes creer lo que estas oyendo te quedas muda cuando un pequeño sonido se escapa sin tu permiso. Esto es seguro, de pedos no se hablara mas...
1 comentario:
Es terrible, todo el tiempo trato de mantener conversaciones como las que tenia antes y cuando lo consigo empiezo a nombrar a mi beba.
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